viernes, diciembre 31, 2010

Cierre del 2010

Escribo esta entrada a unas horas de que el año 2010 termine definitivamente y empiece el 2011, por lo que empezaré con mi recuento de lo que han significado estos 12 meses para mi. Me doy cuenta que es el tercer año consecutivo que hago esto, así que por tradición, lo continuaré.

Este año ha sido muy movido, con muchos cambios en distintos aspectos y en diferentes niveles, desde lo más simple hasta los hábitos mas antiguos.

Para empezar, mi familia creció y he tenido la oportunidad de explorar esto de la paternidad, que incluye una gran dosis de desveladas, no dormir tranquilo, despertar a media noche, preparar biberones en la madrugada... pero también incluye un montón de cosas satisfactorias y divertidas. Es increible ver como un bebé va aprendiendo cosas, descubriendo que puede modificar su ambiente, afectar a quienes le rodean...

En el aspecto laboral estoy mucho mejor que el año pasado, ya que sólo me quejaba de la situación, en este año he trabajado mucho mas en las cosas que me gustan, valió la pena el cambio, ya que ahora me encuentro rodeado de gente interesada en el e-learning, con conocimientos y con ganas de seguir aprendiendo, adicionalmente, ahora encontré personas muy agradables con quienes he podido entablar una amistad y no solo limitarme a saludar en la mañana. Son muchas las ventajas que da el tener un agradable ambiente de trabajo y saber que puedes confiar completamente en el equipo, pues todos tienen conocimientos, capacidades y aptitudes.

Me siento muy feliz de poder tener amigos en el espacio de trabajo, gente con quien compartir charlas, comidas y un drink de vez en cuando, para mi es toda una novedad saber que puedo comer con gente distinta cada día de la semana y que todos me caen bien y me siento a gusto con todos y cada uno de ellos.

En resumen, este año que muere es increible para mí, me dejó mucho aprendizaje, estoy menos amargado que el año pasado y ahora soy un hombre de familia.

Feliz 2011, a enfrentarlo y ser felices.

viernes, agosto 27, 2010

Retomando el rumbo

Hace tanto que no escribo en este blog que ya casi no recuerdo lo que es la experiencia, todo se ha ido en la vorágine de los 140 caracteres. El tomar un respiro, pensar lo que se quiere plasmar, redactarlo de una forma mas o menos comprensible, usando todas las palabras necesarias... Eso si es una experiencia relajante.

En este momento aprovecho el aislamiento y tranquilidad que me proporciona el camión que me lleva rumbo a mi base de operaciones para plasmar esta idea que lleva rondando mucho tiempo en mi.

Tengo que escribir, dejar que fluyan los caracteres y se transformen en ideas, es momento de reconciliarme con el teclado para mi goce personal y no solo usarlo como herramienta productiva, hay que retomar el rumbo.

Enviado desde mi MotorolaQ9c de Iusacell

martes, junio 08, 2010

Estás muy acostumbrado a la red

Antes de iniciar con este tema, recuerdo nostálgicamente cuando escribí este profético post en el que se iba vislumbrando la muerte de Palm y que HP la compraría. ¡Te extrañaré Palm!

Ahora si, vamos al tema. En una conversación con un amigo que da clases de iniciación al cómputo para universitarios, discutíamos sobre aplicaciones de ofimática que fueran una alternativa al MS Office, y a mi se me ocurrió recomendar Google Docs: sin costo para los usuarios, omnipresente, sencillo y justo para la mayoría de trabajos. Él sólo me vió y dijo que no era viable, que no todos sus alumnos tienen Internet en casa, así que una solución de "Nube" no es funcional. Su frase final: "Estás muy acostumbrado a la red"

Días después recibo una llamada de trabajo en casa donde me piden que revise unos documentos, genere una propuesta y la mande a un grupo de personas. Lo primero que pensé fue "reviso el Dropbox y si ahí no encuentro los documentos, abro una sesión remota en mi máquina del trabajo con Team Viewer...." y repentinamente caí en cuenta que efectivamente estoy muy acostumbrado a la red, en los últimos tres meses he tenido una conexión 24/7 permanentemente en uso: recibo correos, vargo cursos, modifico sitios, veo archivos en la nube, cambio estados en redes sociales...

La red se ha integrado tanto en mi día a día que mi primera opción de pensamiento tiene que ver con la utilización de alguna de las herramientas de la nube y difícilmente concibo mi día sin tener a la mano una conexión a Internet (aunque no la use).

Estás muy acostumbrado a la red.

Totalmente cierto.